Cómo jugar al Solitario
El Solitario es en gran medida un juego de paciencia. Te enseña a pensar con cuidado al planificar tus decisiones, haciendo que tu mente se concentre únicamente en la tarea que tienes entre manos. Aprender a cómo jugar al Solitario es bastante simple. Un juego de Solitaire solo requiere que conozcas los cuatro palos de las cartas (corazones, diamantes, tréboles y picas) y que cuentes del as al rey.
Pon la mesa
Antes de sumergirse en un juego, debe saber cómo se configura la mesa. Este es un componente clave de cómo jugar al Solitario. nHay cuatro partes principales para repartir un juego de Solitario:
- El Tableau: Las siete filas de cartas que componen el área de juego principal.
- La Fundación: Las cuatro pilas donde se organiza cada palo en orden ascendente.
- El stock: el mazo de stock contiene todas las cartas restantes que no se usaron para completar el cuadro. Dependiendo de las reglas que establezcas, robas una o tres cartas de esta pila cuando no quedan movimientos en el tablero.
- The Talon: Esta es la pila de desechos; donde van las cartas extraídas del mazo si no caben en ningún lugar de la mesa. Esta pila se recicla cuando terminas de pasar por todo el mazo de existencias.
Afortunadamente, cuando juegas digitalmente, toda la configuración está hecha por ti.
Las cartas están separadas en siete columnas a lo largo de la superficie, con la primera carta de cada fila boca arriba. Después de la primera columna, cada pila tendrá un número de cartas boca abajo detrás de la primera. Es tu trabajo revelar tantas cartas ocultas como sea posible lo más rápido que puedas.
En la esquina superior izquierda, encontrarás el mazo de acciones.
Al otro lado de la cubierta está la base. Esta es el área donde organizas las cartas por palo, del as al rey.
Cómo jugar al Solitario
El Solitario es un juego bastante simple con muy pocas reglas, por lo que aprender a cómo jugar al Solitario no debería llevar mucho tiempo. Tu objetivo al jugar es despejar el tablero y organizar cada palo. Para hacer eso, debes trabajar para descubrir todas las cartas ocultas tanto en el cuadro como en el mazo de acciones.
Puede apilar cartas en orden numérico una encima de la otra en el cuadro, pero aquí está el problema: solo puede apilar cartas alternando entre los palos rojo y negro. Por ejemplo, un dos rojo solo se puede apilar sobre un tres negro, un tres negro solo se puede apilar sobre un cuatro rojo, y así sucesivamente.
Al comienzo del juego, solo podrás mover la primera carta de cada montón. Lo mejor es empezar a apilar las cartas lo antes posible. A menudo, podrá hacer algunos movimientos usando solo las cartas en el cuadro. A medida que apila sus cartas de cuadro, comenzará a revelar las cartas ocultas, lo que le dará más opciones para colocar y apilar.
Una vez que haya agotado todos los movimientos disponibles en el cuadro, puede consultar el mazo de valores para obtener nuevas cartas. Dependiendo de su nivel de experiencia, puede sacar una o tres cartas del mazo. Si roba tres cartas, solo puede usar la primera carta del sorteo antes de pasar a las otras dos. Si no puede usar la carta superior de ninguna manera, continúe con el siguiente sorteo.
Sin embargo, en nuestra versión del Solitario, ¡perderás puntos cada vez que reinicies el mazo! Así que tendrás que pensar en tus movimientos con cuidado cuando saques de la culata.
Cuando borras una fila de cartas, se abre un espacio vacío en la mesa. Un espacio vacío puede ayudarte a descubrir más cartas ocultas, pero solo puedes llenar este espacio con Reyes, ¡así que planifica sabiamente!
Otra cosa a tener en cuenta: Ases. Los ases no tienen un lugar en el cuadro, por lo que no podrá apilarlos en las siete pilas principales. Cuando te encuentres con un As, simplemente envíalo directamente a la base. Una vez que tenga un As en la base, puede comenzar a apilar cartas del mismo palo en la parte superior, comenzando con dos.
Ahora que sabes cómo jugar al Solitario, tenemos algunos trucos bajo la manga.
Juega como un campeón
Como con cualquier juego, cuanto más juegues al Solitario, más rápido podrás terminar el juego. Hay algunos trucos para cómo jugar al Solitario que pueden ayudarte con tu proceso de organización y toma de decisiones.
La gran revelación. Lo mejor es comenzar un juego con el objetivo inicial de revelar cada una de las cartas ocultas en el tablero. Cuantas más cartas descubras, más opciones tendrás a la hora de planificar tus movimientos.
Piensa cuidadosamente. Es posible que te encuentres con algunas decisiones difíciles a lo largo del juego, especialmente cuando tienes algunos movimientos posibles disponibles para ti. Digamos que hay dos reinas rojas sobre la mesa, ¿cuál apilas encima del rey negro? Siempre es mejor ir por la carta que está encima de las cartas más ocultas.
La paciencia es clave. El mayor activo que tienes en un juego de Solitario es la paciencia. El juego te hace pensar detenidamente y hacer conjeturas informadas al planear tus movimientos. Mover las cartas sin pensarlo puede arrinconarte y obligarte a reiniciar la mano. Estudia cada carta cuidadosamente antes de moverte y recuerda: ¡te costará puntos deshacer movimientos!
Pon tus habilidades a prueba
¿Te sientes seguro de cómo jugar al Solitario? ¡Juega un juego de Solitario para poner a prueba tus conocimientos!